Cuando conduces estás rodeado de objetos, vehículos, personas y un entorno que determina tu comportamiento en la vía. Te contamos sobre la importancia de asumir un rol responsable ante cualquier eventualidad.
Durante la conducción, tu seguridad y la de los demás deben ser la prioridad con el fin de construir una movilidad responsable. Para ello, y tan esencial como revisar el estado del vehículo en que te mueves (carro, moto, bici o patineta), es saber gestionar emociones como ira, miedo, sorpresa, alegría o vergüenza, las cuales quizá generen distracciones que, a su vez, produzcan accidentes de tránsito.
Lo más importante, en ese sentido, es tener claro en dónde está puesta tu responsabilidad y qué tan consciente eres de tu rol en la vía. Si bien son muchos los factores que causan los accidentes (mal estado de las calles u objetos intrusivos en ellas, mal comportamiento de otros conductores y el clima), hay que aceptar cuando estos se dan por fallas propias para aprender de la situación y no repetirla.
Pavel Herrera y José Oveth Vargas, consultores de Movilidad Segura de SURA, explican que, como seres humanos, tendemos a pasarle la responsabilidad a algo o alguien “porque aceptarla no es parte de nuestros genes”. Esas responsabilidades, según los expertos, se transfieren así:
- A sí mismo: solo el 5 % de las personas asume su error. Es fundamental que te preguntes qué compromisos tienes frente a la movilidad segura y qué normas debes cumplir para aportarle.
- A los objetos: 5 % de los conductores que sufre accidentes asocia la causa a imprevistos en la vía: huecos, piedras, semáforos dañados o pintura deslizante.
- Al vehículo: el 20 % de las personas involucradas en accidentes de tránsito asegura que la culpa fue del vehículo porque no recibió el mando de freno y perdió el control de este. Cerciórate de que el tuyo (el que sea) cuente con todos los elementos de seguridad necesarios para que te brinde confianza.
- A los otros: el 70 % de los conductores dice que la responsabilidad es de otro que no frenó a tiempo o apareció de la nada por no marcar un pare o irrespetar un semáforo.
Beneficios de pensar en la seguridad en la vía
Circular siempre por la derecha y adelantar por la izquierda, usar las direccionales al girar o cambiar de carril, prender las luces en carretera y respetar los límites de velocidad, las cebras y las señales de tránsito son prácticas que se vuelven cotidianas cuando pones la seguridad por encima de otros aspectos como tiempo, dinero y comodidad. Asimismo, cuando tomas decisiones responsables frente a tus desplazamientos y evalúas los riesgos sin culpar prematuramente a nadie.
Herrera y Vargas concluyen que la responsabilidad y los buenos hábitos también se adquieren cuando te comprometes con el medioambiente y, por ende, caminas con frecuencia o utilizas vehículos que no contaminan como la bici y la patineta. Más que solo centrarse en el cumplimiento de las normas, se trata de pensar tanto en el bienestar propio como en el colectivo.
Fecha de publicación: junio 30 de 2021.
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